El operador de cable ONO y los sindicatos han pactado rebajar de 944 a 898 el número de trabajadores afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que la empresa de telecomunicaciones presentó el pasado 15 de febrero, han informado fuentes sindicales.
Tras las dos últimas reuniones esta semana, la compañía ha reducido en 46 personas el número de afectados, cifra que se corresponde con las bajas producidas en la empresa durante el pasado mes de diciembre, sin contar los directivos y comerciales despedidos durante este período.
Fuentes sindicales temen que Cataluña, donde Auna tenía su sede corporativa, sea una de las comunidades autónomas más afectadas por este recorte de trabajadores, junto con Valencia y Madrid.
En cuanto a las indemnizaciones, la dirección del operador de cable ha lanzado su primera propuesta de 22 días por año trabajado y una paga de mil euros por año de antigüedad, alternativa que los sindicatos han rechazado, aunque, por el momento, no han trasladado una contra propuesta a la espera de que ONO rebaje el número de afectados.
Por otra parte, pese a que la empresa sigue sin especificar los centros territoriales que reestructurará, en la reunión de ayer ONO amplió de siete días a tres semanas el periodo de voluntariedad, que empezará una vez abierto el plazo de despidos, previsto para el mes de junio.
Según fuentes sindicales, a fin de "lograr el máximo mantenimiento de empleo", CCOO, el Sindicato de Trabajadores de Comunicaciones, UGT, CGT y APLI han convocado un primer paro general de cuatro horas el próximo 17 de marzo y otro el día 24, así como dos paros más -de jornada completa- el 30 y el 31 del mismo mes.
Aunque el plazo mínimo de negociación entre las partes, de 30 días naturales desde la presentación del ERE, finaliza el próximo viernes, las reuniones entre los sindicatos y la empresa continuarán el próximo martes, cuando ONO "lanzará su última oferta", han explicado fuentes sindicales.
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