El Plan de Impulso de la Economía Digital y los Contenidos Digitales, una de las siete lineas de actuación principales que el ministerio de Industria presentó hace unos días para alcanzar los objetivos de la Agenda Digital Española, buscará acabar con las numerosas webs de descargas no autorizadas que operan desde nuestro país. Lo hará tratando de asfixiarlas económicamente cerrando sus fuentes de financiación.
Los autores del plan, que se aplicará a partir del próximo año, quieren favorecer la creación, producción y comercialización de contenidos digitales. Pero para ello reconocen que antes es necesario reducir la piratería borrando del mapa las webs que los divulgan sin autorización de los titulares de los derechos.
El Gobierno acusa a estas webs de utilizar estos contenidos "como reclamo para ofertar servicios ajenos, como hacen algunas páginas de enlace a contenidos no legales".
El punto 16 del plan describe como se estrechará el cerco desde un "observatorio sobre la oferta no autorizada en la red", cuyo trabajo será identificar a las empresas que se anuncian o proporcionan algún servicio, "directa o indirectamente" necesario para el funcionamiento de las webs.
El siguiente paso será persuadir a estas empresas para que dejen de dar soporte a las webs de descargas. Concretamente se citan a empresas de "publicidad digital", "pagos online" o "venta de hardware audiovisual". El objetivo reconocido es "evitar que las webs que hacen de los contenidos ilegales un negocio reciban fondos a través de estos medios" y por tanto no puedan continuar operando.
Los usuarios no se quedarán sin alternativa. La estrategia definida valora en 40 millones de euros la inversión que se destinará simultáneamente para potenciar el consumo de contenidos por vías legales, gracias a la colaboración conjunta de operadores de banda ancha y los proveedores de contenidos.
