Los tribunales obligan a la cadena de tiendas FNAC a entregar los pedidos de móviles puestos a la venta por error en su tienda online a un precio muy inferior al real y que fueron adquiridos por casi 13 mil clientes.
En octubre de 2019 la FNAC puso a la venta en su tienda online el smartphone Huawei P30 a un precio de 139,90€, muy por debajo de su precio oficial de 699,90€. Un total de 12.911 clientes completaron el proceso de compra para aprovechar la increíble oferta, que en realidad no era tal, sino un fallo de los responsables de la web que fijaron un precio muy por debajo del que correspondía.
Cuando la FNAC se percató del error procedió a cancelar sistemáticamente los pedidos, devolviendo el dinero pagado a los compradores. Parte de ellos entendieron que la transacción estaba cubierta por un contrato de compraventa que la empresa debía cumplir y no aceptaron la cancelación, llevando el caso ante la Junta Arbitral de Consumo a la que el comercio está adherido.
La empresa alegó que se trataba de un error tipográfico del que advirtieron nada más detectarlo, y que esto era algo evidente para un consumidor medio debido a la gran diferencia de precio respecto a otros comercios. El árbitro dio la razón a los clientes, sentenciando que la FNAC debía entregar los móviles al precio ofertado, o uno de similares características. FNAC recurrió antes otros organismos y juzgados que le dieron la razón.
La Unión de Consumidores defendió la resolución del laudo arbitral ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid al que FNAC recurrió para pedir su nulidad. Finalmente el juez ha dictado sentencia ante la que no es posible recurrir, obligando a la cadena de tiendas a cumplir con la decisión del árbitro, lo que implica que tendrán que entregar los más de 12 mil pedidos al precio ofertado.
