Estimados amigos,
Me gustaría si es posible hacer un llamamiento para que si no se puede llegar a forzar una ley, si al menos que algún organismo regulador se encargue de hacer cumplir lo siguiente:
Sería muy interesante por el bien de todos los usuarios informáticos, que aquellos fabricantes o distribuidores de hardware para ordenadores, entreguen el código fuente de los drivers de dichos productos, cuando estos dén por discontinuados, o por finalizado el soporte para dicho producto.
Es decir cada fabricante mantiene su derecho a no revelar el código fuente de sus drivers, si así lo prefiere o le interesa, pero siempre y cuando el soporte para ese producto siga existiendo, porque si no se provoca una obligada actualización del hardware a millones de usuarios con el único fin y objetivo de seguir enriqueciendo a dichas empresas.
Para muestra un botón, Ya.com vendió miles de modems 3Com de un producto discontinuado, sin drivers para los últimos sistemas operativos. De igual forma el router 3Com 812 es un producto discontinuado desde hace ya bastantes meses, y sin embargo cuántos usuarios de ADSL de España poseen ese router.
Pero no es una guerra contra los operadores, esto no va sólo con ellos, los fabricantes de tarjetas de video, se escudan cada vez más en que el soporte de su tarjeta termina siendo asumido por el propio sistema operativo, pero eso es una verdad a medias. Si alguien en su momento compró una tarjeta de video porque era capaz de ofrecer salida a TV o incluso entrada, esas capacidades especiales sólo están cubiertas por los drivers del propio fabricante, y no por el driver standard del sistema operativo. Sin ir más lejos esto ocurre por ejemplo con la tarjeta S3 Virge GX2, en formato AGP, y con 4 MB. Puede ser una tarjeta con poca potencia hoy en día, pero debe ser el usuario quien decida como rentabilizar su inversión, y no que hoy día si se quiere usar esa tarjeta en Windows 2000, ya ni siquiera en Windows XP, se puede utilizar, pero para nada hacer uso de sus capacidades de salida a TV.
Por tanto denuncio y demando que a quien le corresponda exija a los fabricantes que siempre y cuando consideren su inversión rentabilizada, y se dispongan a dejar de dar soporte a un producto por completo, liberen el código fuente de dichos productos a fin de que aquellos usuarios que lo consideren oportuno puedan de forma libre y sin ánimo de lucro continuar la labor que otros no han querido hacer.
Javier Castilla S.
Un saludo.