La nueva Ley General de Telecomunicaciones (LGT) nombra a la CNMC como vigilante de la calidad del servicio que prestan las operadoras. Además de la velocidad, las compañías tendrán que medir e informar de la latencia, jitter y pérdida de paquetes que presentan las conexiones a internet fijas y móviles.
La anterior LGT delegaba en el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital la labor de vigilar la calidad del servicio que prestan las operadoras de telecomunicaciones. Las compañías remiten trimestralmente una serie de indicadores de calidad, como lo que tardan en dar servicio a un nuevo cliente tras el alta o el tiempo medio que lleva solucionar una incidencia. También se mide la velocidad de la fibra y los datos móviles, indicando las velocidades mínimas, medias y máximas que registran en la red de la operadora una serie de sondas.
Gracias al enorme caudal que soporta la fibra, el ancho de banda ha dejado de ser un problema, pero la latencia que ofrece una conexión a diferentes servicios online es ahora el elemento que marca la diferencia. No solo para jugar online es necesario un tiempo de respuesta mínimo, sino que cada vez más servicios alojados en la nube necesitan acceder a recursos de computación remotos con baja latencia.
La nueva LGT es más estricta todavía con la calidad prestada por las compañías de internet, ya que además de la velocidad, vigilará parámetros relacionados con la latencia de la conexión. El nuevo texto obliga a medir la "Latencia (retraso), Fluctuación de fase y Pérdida de paquetes" siguiendo las indicaciones del Código Europeo de las Comunicaciones Electrónicas.
La latencia es el tiempo que tarda un paquete de datos en llegar a su destino, la fluctuación de fase es conocido como el jitter, que mide cómo varía la latencia a lo largo del tiempo. Finalmente la pérdida de paquetes mide qué porcentaje de paquetes son descartados y deben reenviarse por no haber confirmado su recepción, lo que puede indicar saturación y otros problemas.
La CNMC sustituye al Ministerio como supervisor de la calidad del servicio de las operadoras
Además de más parámetros que medir, las operadoras tendrán un nuevo vigilante encargado del control de calidad. Si hasta ahora era la Comisión para el Seguimiento de la Calidad en la Prestación de los Servicios de Telecomunicaciones del Ministerio la responsable de esta labor, la nueva LGT otorga a la CNMC esta competencia.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, previo informe de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, especificará los parámetros de calidad de servicio que habrán de cuantificarse y los métodos de medición aplicables, así como el contenido y formato de la información que deberá hacerse pública, incluidos posibles mecanismos de certificación de la calidad.
Vigilancia de la calidad de internet rural
Con esta información la CNMC también vigilará la calidad de la banda ancha que se ofrece fuera de las ciudades en el entorno rural. Cada 2 años el regulador publicará un estudio comparativo que resalte la calidad de la fibra y móvil que reciben los usuarios en zona rurales respecto a la que recibe el resto del país.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia realizará bianualmente un estudio de la calidad de servicio ofrecida a los usuarios finales radicados en las zonas rurales y escasamente pobladas respecto de la calidad media de servicio ofrecida al conjunto de usuarios radicados en el resto del país.