La disputa entre la CMT y la Comisión Europea por la regulación de la fibra óptica hasta el hogar en España podría estar cerca de su fin. Ambas partes han anunciado que hay un principio de acuerdo.
La CMT ha tenido que renunciar a su aspiración de regular por zonas, en función del número de operadores presentes en una central. Por su parte, la CE permitiría que Telefónica no tenga que ofrecer a sus rivales la reventa de sus conexiones de más de 30 megas, aunque se reserva sugerir mayores obligaciones si Telefónica continúa ganando cuota de mercado.
Varios periódicos comentan el acuerdo aportando diversos matices. Por ejemplo, Expansión menciona que la CMT ya dispone de una nueva redacción de la regulación de las redes de nueva generación y que podría ser aprobada en cuestión de días.
Ayer, en el 10 aniversario de la liberalización de las telecomunicaciones que se celebra en Barcelona, se palpó la tensión entre la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, quien dijo que las redes fijas y móviles "deberán estar siempre abiertas a todos los competidores. No permitiremos que a costa de las nuevas redes de fibra se vuelva al monopolio de Telefónica en España" y el presidente de Telefónica, Cesar Alierta, quién advirtió que la intervención de Bruselas pone en peligro los 250.000 millones de inversión en nuevas redes en Europa y los 1,8 millones de empleos previstos.