Por responderte... estoy de acuerdo contigo a medias... De entrada, me parece una práctica mafiosa el que una asociación privada se lucre directamente de cada compra que yo realizo de un dispositivo de almacenamiento cuyo uso es privado. En eso creo que coincido con tod@s, pero me gustaría hacer alguna apreciación que vá más allá. Más grave me parece aún que, tras pagar ese canon que me autoriza legalmente a usarlo para realizar una copia privada de una obra que ni siquiera está registrada por su asociación en la mayoría de los casos, tenga que soportar que la gente al cargo de esa asociación privada me llame sistemáticamente (a mí y a millones de usuari@s, que formamos un grupo de personas sustancialmente superior al que representa dicha asociación privada, y repito, privada, pues es una empresa privada) PIRATA y me acuse de latrocinio. Cómo se llama eso? Difamar quizás? Por qué la justicia no actúa de oficio para tomar acciones legales contra una empresa que se dedica noche y día a difamar y atentar contra el honor de una porción de población considerable del país al que pertenece?
Pero no estoy de acuerdo del todo con lo que comentas, Sr Cuesta (me mola tu nick :P) , sobre el canon a bares y similares, al menos de una forma directa, imperativa e indiscriminada, por varias razones, tanto legales como prácticas o comerciales:
1. los bares, si han adquirido los discos de manera legal o son obras no inscritas en la SGAE, no tienen por qué pagar unos derechos de los que no están haciendo uso. De igual manera, cómo se puede medir la cantidad de música registrada en esta asociación, que se pincha en cada bar determinado? Ponemos un SGAE-metro?
2. no se puede negar que los bares son una herramienta de promoción importantísima para la industria musical... sobretodo en cuanto a la música de consumo masivo... o alguien se imagina que el "pachangueo" (ese género tan lucrativo y "fácil" de fabricar por las discográficas, por el nivel de control que pueden ejercer sobre los artistas, entre otras cosas) hubiera calado en nuestra música si no fuera poque lo ponen en los bares?. Es una relación de simbiosis que debe cuidarse. De lo contrario, en caso de que se impusiera un canon a bares, puede que muchos establecimientos preferirían no pagarlo y, aunque en un primer "golpe" muchos clientes migrarían hacia bares que tuvieran "música conocida", la saturación podría llevar a la gente a, poco a poco, acostumbrarse a música no registrada en la SGAE por acudir a bares donde no se pinchara esa música y acabar interesándose por artistas de los que la SGAE no podría obtener beneficios; en consecuencia, se beneficiaría a discográficas más discretas o alternativas que no comulgan con la industria que está de acuerdo con estas iniciativas y, al final, perderían un buen trozo del pastel... Hay que tener cuidado con cómo se diseñan ciertas estrategias...
3. si este principio se aplica a la música, podríamos aplicarlo también a otros elementos que pueden formar parte del atractivo de un bar y que, por tanto, consideramos que los dueños del establecimiento se estén lucrando gracias a él. Por ejemplo, si tenemos un poster enmarcado de una película, supone un atractivo decorativo (que no se oye, pero que se ve), que además es una obra con propiedad intelectual (exactamente lo mismo que la música) y que está a los ojos de toda la gente... es decir, todo la gente que entra al bar está disfrutando de una obra que se ha adquirido para uso privado... Os imagináis que tenéis que pagar 100€ al mes por tener un poster pegado en la pared?
Se está llevando todo este asunto por un camino legal que, en el momento en el que salgan unos pocos jueces con un par de huevos (y perdón por la expresión) se les puede ir literalmente a tomar viento todo el sistema que están maquinando... una pena que el mundo ande de forma que esto no suceda (aunque hay pequeños brotes de sentido común en algunas salas y por eso se dan sentencias contrarias a la industria en tantas ocasiones). De entrada, en la actualidad, se está propiciando el oligopolio de la industria del entretenimiento, incluida la música, por supuesto. Cuándo van a empezar a considerar que se está limitando la competencia? En qué se beneficia el consumidor con el modelo de industria musical (y de entretenimiento en general) actual? No se dan cuenta de que todas estas medidas abusivas no sólo repercuten al consumidor de forma negativa, sino también a la propia industria?
No sé si alguien se ha parado a pensar en ello, sobretodo la gente que tenga conocimientos de marketing... pero no os parece que la industria discográfica no está siendo verdaderamente creativa en este aspecto?. No han aprendido de otros mercados, como el de las lineas aereas? Imaginad lo que podría pasar si llevamos el marketing al extremo en una discográfica y construimos algo del estilo de EasyJet, RyanAir o cualquier empresa de bajo coste... Hoy en día es completamente posible ofrecer discos a 1€ o incluso por céntimos, obteniendo un beneficio brutal... sólo les hace falta un poco más de pensamiento lateral...
Incluso se puede perfilar un escenario legal en el que ciertas discográficas, nacidas de asociaciones de artistas que están descontentos con el trato de la industria, se agarren a este modelo, sobretodo teniendo en cuenta que su mayor fuente de ingresos son los bolos y conciertos...
Si es que están tratando a un bien cultural como un producto para el comercio, pero se están cegando, ofeciendo ideas y productos que no se ajustan a los deseos de los consumidores...
No sé, podría estar aquí siglos hablando sobre las ideas que me vienen a la cabeza y lo desacertado que veo de la estrategia que están llevando a cabo las grandes empresas discográficas (a las que se les deja campar a sus anchas en un escenario de competencia mínima y acuerdos entre ellas que no benefician al consumidor...) y las propias autoridades (que son capaces de poner patas arriba todo un sistema legal, pues con cada modificación de una ley crean un conflicto en otra existente...), rendidas a los intereses de dichas empresas... La ley debe garantizar la protección del más débil y reflejar y actuar en armonía con la realidad sobre la que está construida, no empujar en sentido contrario para construir una realidad que no beneficia al grueso de la gente que la compone. Que conste que tengo mucho respeto por los derechos de propiedad intelectual (los tengo sobre los míos propios, como músico y artista "aficionado", cómo no los voy a tener sobre los de l@s de l@s demás...), sólo creo que las cosas se pueden hacer de otra manera...
En definitiva y, resumiendo mucho (que ya me vale con el tocho), no hace falta una legislación diferente (quizás en todo caso sólo retocar alguna cosa para adaptarla a los nuevos tiempos), sino emplear la cabeza y, del mismo modo en que en el resto de los mercados, las empresas deben evolucionar para adaptarse a nuevas situaciones, se debe apostar por ese modelo natural, en vez de cambiar las leyes, sobretodo cuando el escenario que pueden dibujar no está nada claro.
En serio, perdonad por el tocho :P