Saltaba la noticia a principios de semana pero hoy se ha confirmado. En un comunicado emitido por el director general de la empresa, Satya Nadella, Microsoft indica que la reestructuración de nada menos que de 18.000 trabajadores -y excusándose en la adquisición de Nokia- tendrá un coste de entre 1.100 millones y 1.600 millones de dólares (entre 812 y 1.182 millones de euros) en los próximos cuatro trimestres. El 30 de junio de 2015 se espera haber completado el proceso que afecta al 14 por ciento de la plantilla. El asunto es tan grave que hasta la Unión Europea mediará en él.
Reconocemos estos cambios planeados son amplios y tienen implicaciones muy difíciles para muchos de nuestros miembros del equipo. Vamos a trabajar para proporcionar la mayor claridad e información como sea posible.
Así lo comunicaban mediante email a los 125.000 trabajadores que ya tenía Microsoft, hubo que sumar otros 30.000 así que según explican en la compañía fabricante del sistema operativo Windows, este es el resultado para poder asumir la adquisición.
Entretanto, la Unión Europea, a través del comisario de Empleo, László Andor, ha señalado que esto no debe menoscabar las inversiones en el sector TIC y que los "trabajadores afectados por el anuncio de hoy deben recibir apoyo para ser recualificados y si es necesario, ayudarles a encontrar un nuevo empleo lo antes posible". Una quimera ante el número tan alto de despidos.
Fundada en 1975, Microsoft (en el Nasdaq como "MSFT") es uno de los líderes mundiales en software, servicios, dispositivos y soluciones.