El nuevo informe sobre el estado de internet de Akamai confirma que nuestro país ha marcado un cambio de tendencia en el crecimiento de la velocidad a la que navegamos por internet, aumentando un 42% en el último año.
Aunque la velocidad de los usuarios que seguimos dependiendo del cobre no crece desde hace dos años, cuando se realizaron los últimos aumentos de velocidad, el carro de las redes de nueva generación es ahora el que está tirando para elevar la velocidad media del país.
Así lo atestiguan las mediciones que realiza Akamai cada trimestre desde sus centros de distribución de contenidos. Después del último aumento de velocidad de Movistar con el paso de 6 a 10 Mbps que realizó gratuitamente a sus clientes ADSL durante el 2011, la media del país pasó de 3,9 a 4,6 Mbps en el primer trimestre de 2012.
Pero no ha sido hasta el inicio del 2013 cuando ha despertado la velocidad en España. En el primer trimestre del pasado año marcábamos casi 5 Mbps y desde entonces el aumento ha sido muy superior a lo habitual: 5,9 en el segundo semestre y 6,9 Mbps en el tercero, que es el último periodo sobre el que Akamai ha publicado los datos.
Si lo comparamos con países de nuestro entorno, la tendencia ha sido similar, a excepción de Italia. Nuestro lugar estaría por detras de Alemania (7,6 Mbps) y Reino Unido, que se desmarca con 9,1 Mbps de media nacional.
