La CMT responde positivamente a la consulta de una comunidad que preguntó si debía inscribirse como operador de telecomunicaciones para que los vecinos del inmueble puedan compartir los costes de contratar un acceso a Internet. El regulador advierte que redes similares con mayor número de usuarios requerirán una análisis concreto.
La comunidad que realiza la consulta plantea contratar un acceso a Internet a cargo de la comunidad y compartir el servicio entre todos los vecinos interesados. El coste de la línea se sufragaría mediante las cuotas de comunidad habituales. La señal se distribuiría por PLC hasta varios puntos de acceso WiFi repartidos por la escalera.
La CMT entiende que esta red no es una actividad económica para la comunidad y que va destinada a satisfacer sus propias necesidades de comunicación, por lo que se enmarcaría dentro del régimen de autoprestación. No es necesario en ese caso inscribirse en el registro de operadores ni cumplir las obligaciones a los que estos están sometidos.
Sin embargo, aunque esta red reúne todos los requisitos, otros casos similares pero que afecten con un "ámbito mayor de usuarios" deberán ser analizados de forma particular por la CMT.
Debe tenerse presente que lo analizado en esta consulta se corresponde a un escenario muy concreto que reúne una serie de características puntuales como la inexistencia de ánimo de lucro, el que la red y el servicio no están abiertos al público en general, y que la comunidad de propietarios no se hace responsable de la prestación del servicio ni ofrece un servicio de atención al cliente. Por consiguiente, la existencia de otros escenarios en los que se pudiera dar alguna de las características citadas, o incluso en el caso de que se dieran todas ellas en un ámbito mayor de usuarios o de aplicación masiva deberá ser analizada por esta Comisión en cada caso concreto.
Otro de los problemas con los que se encontrarán son los contratos de servicio de las operadoras, ya que muchos prohíben expresamente revender el servicio fuera del domicilio. También hay que tener en cuenta que la IP se compartirá entre todos los vecinos, por lo que cualquier limitación por IP afectará a todos.
Sin duda se trata de una forma inteligente de conseguir aquello que las operadoras no quieren darnos: Conexiones a internet con una velocidad básica a un precio muy bajo.
