El Ministerio de Industria ha iniciado una consulta pública para incluir la banda ancha como servicio universal, de forma que todos los ciudadanos tengan derecho a un acceso a Internet de banda ancha independientemente de su lugar de residencia. Propone velocidades de entre 512 Kb y 2 Mb, que podrían llevar asociado limites de tráfico.
Las tecnologías DSL serán el principal medio para llevar la banda ancha a todos los rincones del país. Aunque no se considera a la banda ancha móvil como sustituto de la fija, si se contempla el uso de las tecnologías inalámbricas como 3G, WiMAX e incluso el satélite para cubrir las zonas más remotas.
Velocidad entre 256 Kbps y 2 Mbps
Afortunadamente, en la consulta parecen descartarse las velocidades más basicas, como 256 Kbps, que es el criterio que se viene utilizando desde hace años para determinar la cobertura de la banda ancha.
Así, una velocidad de 256 Kbps puede resultar suficiente para correo electrónico, navegación Web y descarga de ficheros de bajo o medio contenido multimedia. Con una velocidad de 1 Mbps se facilita un acceso adecuado para la mayoría de las aplicaciones actualmente disponibles a través de Internet, a excepción de la TV, para la que se necesitaría un caudal mínimo de 2 Mbps utilizando una codificación MPEG-4.
Se menciona como ejemplo las velocidades "universales" de algunos países de nuestro entorno.
Algunos países de nuestro entorno han publicado objetivos de cobertura de banda ancha al 100% de la población con las siguientes velocidades mínimas: Francia 512 Kbps, Alemania y Finlandia 1 Mbps y Reino Unido 2 Mbps.
Finalmente se pregunta directamente si 1 Mbps es una opción realista, velocidad que en cualquier caso deberá ser revisada periódicamente.
Otro detalle es que el servicio de banda ancha universal probablemente lleve asociado una política de uso responsable. La consulta plantea si deben establecerse limites de volumen de datos.
Será necesario identificar las tarifas o planes de precios, uniformes para todo el territorio nacional, que resulten más económicos para los usuarios que hagan una utilización razonable del servicio y sean compatibles con una prestación rentable del mismo en su conjunto.
Hasta el 26 de este mes, los interesados podrán presentar sus alegaciones. Durante la presidencia europea del primer semestre de 2010, España tratará de aprobar la Carta Europea de Derechos de los Usuarios de Telecomunicaciones, donde finalmente se reconocería la banda ancha como parte del servicio universal de telecomunicaciones.
