Vodafone sigue desafiando a Telefónica en todos los frentes. Además de romper los esquemas de la operadora dominante al lanzar un ADSL de ámbito nacional que prescinde de la cuota de línea, la operadora británica se prepara para atacar zonas del país que hasta ahora han sido dominio exclusivo de Telefónica. La primera, Canarias, donde se convierte en el único alternativo que instala equipos propios en las centrales para dar ADSL de forma independiente.
Canarias es un feudo histórico de Telefónica. Hasta el 86% de las lineas telefónicas pertenecen al exmonopolio. Ono es el segundo operador, con tan sólo el 8% de las líneas, gracias a la herencia que dejó Auna, que a su vez era dueña de la cablera local Canarias Telecom. Allí ofrece modalidades con velocidad inferior a las que pueden contratarse en la península. La razón es el coste elevado que supone alquilar ancho de banda en los cables de fibra que unen las islas con la península.
El dominio de Telefónica es tal, que de los 880.310 bucles que hay en servicio, sólo se han desagregado 395, gracias a algún ISP local que da servicio a empresas. Los operadores nacionales, centrados en las zonas con mayor densidad de población para ser más rentables, descuidan los lugares donde les resulta más caro dar servicio.Por eso, ninguno está presente con equipos propios en las centrales de Canarias, sencillamente por el coste que supone enlazar con el resto del país.
Vodafone no es un operador cualquiera y sabe que para mirar directamente a los ojos de Telefónica, hay que tomar posiciones en todos los frentes. Por eso, la operadora está realizando una importante inversión para coubicar DSLAM propios en las primeras 6 centrales con el fin de dar servicio de ADSL directo sin depender de Telefónica. Se convierte así en el primer alternativo ULL en pisar el territorio virgen de las islas.