El gobierno Británico acaba de desvelar su plan "Digital Britain", que incluye el modelo de respuesta gradual que adoptará Inglaterra contra el P2P. Finalmente las medidas no contemplan la desconexión automática de usuarios reincidentes, pero si que obligarán a los ISP a almacenar pruebas en contra de los usuarios para que puedan ser usadas en un juicio.
El gobierno británico inició hace unos meses una consulta pública para conocer la opinión del sector acerca de como regular el intercambio de archivos mediante el P2P. Los principales ISP han aportado su visión en sus respuestas. Parece que Telefónica no tenía nada que opinar sobre el tema ya que sus filiales, O2 y Be no han participado en la consulta.
Finalmente, hoy el gobierno responde a la consulta pública dentro del "Digital Britain". Aunque aún no se conoce el contenido definitivo de este documento, la nota de prensa publicada sí que resume sus líneas maestras.
¿Canon al ADSL?
Lo que dice el gobierno es que tanteará a los implicados para ver si están dispuestos a pagar una "modesta y proporcionada aportación" con la que se financiarían campañas de educación sobre el uso correcto del material con derechos de autor. The Times cuantifica esta aportación en 20 libras por línea.
¿Se cortará la conexión a los reincidentes?
Las entidades de gestión de derechos podrán presentar a un ISP "suficiente prueba" de que un usuario está compartiendo material ilegalmente. El ISP estará obligado a notificar a su cliente que su conducta es ilegal.
A partir de la segunda notificación, el ISP deberá empezar a recopilar la actividad y datos personales del usuario y almacenarlos, para que, previa orden judicial, puedan ser entregados a las entidades de gestión.