El ISP británico Karoo ha decidido desconectar a los clientes que comparten su conexión mediante WiFi. Esto afectará sobre todo a los usuarios despistados que no saben que tienen el WiFi abierto, pero también a los que lo hacen por generosidad o participando en movimientos como FON.
Se han dado ya varios casos en los que el usuario denunciado por compartir material protegido ha sido exculpado gracias a que tenía abierta su conexión WiFi. Cualquiera puede haber utilizado la conexión y por tanto no es posible probar quien es el culpable de compartir ficheros.
Tampoco les gusta a los proveedores de internet que varios vecinos se pongan de acuerdo para compartir conexión mediante WiFi. Pero hasta ahora nadie había llegado tan lejos como Karoo, quien en septiembre modificó las condiciones de uso de sus conexiones para añadir una clausula en la que explícitamente amenaza con cortar el servicio al usuario que se descubra dando acceso a internet a terceros mediante WiFi.
"We shall be entitled to terminate the Service immediately if We discover that you have permitted (whether knowingly or not) a third party (or third parties) to access the Service using a wireless connection over Your Communications Line.", dice la cláusula 9.6.4 de su contrato (PDF).
En España, esta cláusula existe en la mayoría de contratos ADSL. Telefónica especifica en el punto 5.3 de sus Condiciones Generales del Servicio Línea ADSL (PDF), que "Queda expresamente prohibida la realización de actos de reventa o comercialización del SERVICIO a terceros ajenos a la prestación del SERVICIO o, en cualquier caso, de compartición de recursos fuera del domicilio para el que haya solicitado la provisión del SERVICIO. En caso de incumplimiento de la presente condición, TELEFÓNICA DE ESPAÑA podrá suspender la prestación del SERVICIO".
De momento no hay noticias de que se haya aplicado a ningún usuario, pero dice el refrán que "cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar".
Inspirado en The Inquirier ES.